"Era el objeto más preciado de mi hijo. Se llevaron una parte de él", expresó desconsolada Olga, la mamá, que contó la situación que atravesó Facundo el sábado cerca de las 21, a unas 20 cuadras del centro de la ciudad.

"Mi hijo se quedó sin fuerzas. Era de noche, estaba solo y no había gente alrededor que pudiera ayudarlo. Tuvo que entregar todo, la mochila, el celular y el saxo", relató la mujer.

En las casas de música hay saxos de diferentes precios según la calidad. El de Facundo ronda los 15 mil pesos. Además hay que sumar el bolso para transportarlo.

El joven, de 22 años, no alcanzó a ver el rostro de los motochorros. Recuerda que estaban con casco y una campera de abrigo. Por la voz de los delincuentes, Facundo supone que eran mayores de edad.

No es habitual que el joven camine solo. Su madre cada vez que puede va a buscarlo para evitar que le pase algo malo. Esa noche, cuando Olga intentó comunicarse con él y no le contestó, salió desesperada a su encuentro. Lo vio y su rostro no era el de siempre. Estaba triste.

Facundo subió al auto y le contó el terrible episodio. "Gracias a Dios no le pasó nada, pero se llevaron el instrumento con el que mi hijo expresa sus sentimientos. Su vida es estudiar en la escuela de música, tomar clases particulares y tocar con su banda en recitales", manifestó angustiada.

Realizaron la denuncia y subieron la foto del saxo a Facebook con la intención de encontrarlo.