Rayguan es uno de los acusados de haber asesinado brutalmente a Osvaldo Ramón Ramírez en Plottier en su casa de calle Los Notros al 400 y luego incendiarla para ocultar el crimen, entre la noche del martes 15 de septiembre de 2020 y las primeras horas del día 16. Allí se presentó el sindicado junto a otros dos hombres, compartieron unas horas con la víctima y luego, por razones que se desconocen, lo mataron.

La autopsia del hombre dio cuenta de un total de 23 lesiones con arma blanca repartidas en piernas, muslos, glúteos y otras menores en distintas partes del rostro. También se detectaron golpes múltiples en la cabeza con deformidad de rostro, fracturas múltiples en costillas, lesiones de sujeción en brazos y otras cortantes compatibles con defensa.

Por todo esto, la entonces fiscal del caso Sandra Ruixo acusó a los agresores como coautores de homicidio calificado por ensañamiento. Aunque en un principio, los tres quedaron detenidos, pronto recuperaron su libertad por decisión de un Tribunal de Impugnación, circunstancias en la que Rayguan continuó sumando delitos a su prontuario, los que lo llevaron a la cárcel.

En noviembre de 2020, siguió a su ex pareja hasta un comercio, la golpeó, la insultó y la amenazó. Incluso intentó cortarla con un cuchillo. Cuando la hermana de la mujer intentó intervenir, él continuó agrediendo a ambas.

A raíz de este hecho, el Juzgado de Familia le impuso una orden de restricción de acercamiento a la víctima y ordenó la colocación de una tobillera con localización GPS, la que Rayguan se quitó en mayo de este año.

Luego, en junio, se hizo presente en la vivienda de su hermana -testigo clave en la investigación por el homicidio de Ramírez- y amenazó a ella y sus hijos, intentando y fracasando en ingresar por la fuerza al lugar.

Finalmente, también se lo acusó por un hecho de robo armado a una estación de servicio, ocurrido a comienzos de 2020.

Es por todos estos hechos que la asistente letrada Lucrecia Sola y la defensora oficial Ivana Dal Bianco arribaron a un acuerdo de condena y pena para dar por finalizado el proceso penal contra el sindicado y enviarlo definitivamente a la cárcel. El mismo le fue presentado primero a un tribunal integrado por los jueces Gustavo Ravizzoli, Carina Álvarez y Laura Barbé, quienes lo rechazaron por contemplarse una calificación morigerada del homicidio.

Aún así, Sola y Dal Bianco impugnaron la decisión y así se ordenó una nueva revisión del acuerdo frente a otro tribunal. Esta vez, el mismo fue presentado este jueves ante los magistrados Bibiana Ojeda, Cristian Piana y Mauricio Zabala, quienes finalmente lo avalaron.

De esta manera, Rayguan fue condenado como autor de los delitos de homicidio simple; lesiones leves doblemente calificadas por el vínculo y por haberse perpetrado en un contexto de violencia de género; amenazas con arma (dos hechos); amenazas simples; desobediencia a una orden judicial; y robo calificado por el uso de arma cuya aptitud para el disparo no se pudo acreditar. Por todo eso, deberá purgar 22 años en la cárcel.

Dado que ya contaba con una condena previa por homicidio en riña, se le dictó además su segunda reincidencia.

El tribunal también pudo escuchar el consentimiento del delincuente al acuerdo en audiencia.

Tras debatirlo, resolvieron avalar el acuerdo por unanimidad, y de esta manera, dictaron la sentencia de 22 años de cárcel contra el hombre. Rayguan comenzará a cumplir la pena tras las rejas en cuanto se ordene su traslado, dado que renunció a los plazos de impugnación.